Para los que no saben y les interesa; para los que saben y no les interesa; en fin... para todo aquel que lea... les cuento que mi actividad actual es ser supervisora de mantención de jardín...eso en la práctica significa que ando montada (uyyyyyy....que sezzzzual que me ha salido, coño!) ...en fin... ando en un furgón de marca Fiat....la clásica Fiorino. Salvo por el asiento, que me tiene el poto más plano de lo que lo tengo, es un auto aperrado y fiel... hasta ayer... que el muy desgraciado me hizo una tallita de aquellasssssssss...
Todo ocurre en el subterráneo de la Clínica Santa María, el piso o menos piso... 4 ... no sé a cuántos metros de la superficie de Santiago, pero mi celular no tenía señal... luego de estacionarme decido revisar la parte posterior del vehiculo en cuestión... es cuando me percato que hay una bomba de fumigación medio ladeada y entonces me aventuro en abrir la puerta, treparme y arreglarla... luego que mi no escasa humanidad está adentro.... siento como la puerta se golpea... silencio... en la oscuridad propia de un subterráneo empiezo a buscar la manilla interna para abrir, que después del percance me enteré que JAMÁS funcionó... la presiono una vez; dos veces y nada...uffffff.... en la latitud 33, específicamente en Santiago son las 14.00 hrs y la temperatura bordea los 28 grados.... hace calor y en un subterráneo y arriba de un furgón pasado a olor a pasto se siente más... Piensa, Fernándezzzzzz.... me digo varias veces... hasta que veo mi única salida.... trepar hacia adelante... no iba a ser fácil... mido 1,75 cm y carezco de habilidad corporal... estoy pensando que pierna levantar primero cuando siento ruido afuera.... Praise The Lord! (alabado sea el Señor para el que no parla inglichhhh) .... Toqué la ventanita varias veces para que el de afuera me viera... era un señor de esos que lava autos... el sujeto pasa de largo y como que no se la cree que alguien de la parte de atras de un furgón le toque la puerta... se devuelve...me queda mirando...yo le grito: Señor, me quedé atrapada... El hombre mira con incredulidad... Le vuelvo a gritar: Ábrame la puerta, porfa! aunque por dentro mi discurso es diferente (por qué no me abris la puerta weón, nunca hay visto a una pelotuda quedarse atrapada en su propio furgón?^????)
El hombre accede a tan desesperada petición y abre la puerta. Me desenrrollé... salí...digna hasta la muerte... el sujeto me pregunta: qué le pasó, señora? .... mmmm.... que ganas de decir: "nada, estaba experimentando la sensación de estar atrapada en un subterráneo sin aire y con olor a pasto" ...PERO ...fui decente y dije: ...jejeje...se me cerró la puerta... gracias, me salvo la vida.
En fin... fue una excelente experiencia para terminar la semana... no es la primera vez que me quedo encerrada (como me recordara mi madre)...ya les contaré de cuando me quedé atrapada en el walking closet de mi nueva casa.
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